La jungla de cristal como escapismo circense
Por Santi Martí
Todos hemos visto el cine de Fellini, Fassbinder o Kurosawa. Hemos tragado con la nouvelle vague, el nuevo cine alemán y la quinta generación de cineastas chinos. Vamos a las salas de versión original y a la filmoteca. Pero si todo esto es cierto ¿Alguien podría explicarme por que he visto veinte veces “La jungla de cristal”? ¿Y diez la segunda? ¿Y ocho la tres? Por que cuando pillo cualquiera de estas pelis en la tele me quedo embobado viéndolas. Mientras me cago en Jean-Luc Godard y toda su puta filmografía, Porque la primera parte, por centrarme, de “La jungla de cristal” es puro y cristalino cine de verdad. Auténtico. Reúne en si misma dos escuelas fundacionales del cine: la de los hermanos Lumiére y su tren llegando a la estación y la de Meliés y su viaje a la luna. Y además es una peli sincera que no engaña al espectador. Puro cine y pura vida.
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